Aquí el texto completo:
OTRO AÑO
Otro año sin sus puertas,
abriendo como balcones,
sin que suene su campana
cuidando las tradiciones.
Sin su Virgen nazarena,
Reina de las devociones,
Amargura de su pena,
pañuelo de lamentaciones.
Otro año sin sus ojos, ni
Cristo que nos perdone,
sin esa Santa callada que
aliviando va a los pobres.
Sin su coqueta Capilla,
legado de sus mayores,
que hace ya 40 años fue
bendecida entre honores.
Otro año sin sus brazos,
cobijo de pecadores,
sin su dorado del paso,
historia de devociones.
Sin el llanto de sus hijos
con sus negros capirotes,
sin el sol dando en su
cara, latir de mil corazones.
Otro año sin el Padre,
Redentor de redentores,
Descendido por tu pena y
que alivia los dolores.
Miro y no veo su rosa que
cae de la mano al monte,
Padre Misericordioso, el
auxilio de los hombres.
Otro año sin violetas de
una Santa en los balcones,
donde suenan las saetas al
compás de los clamores.
Me faltan sus nazarenos,
de blanco y negro colores,
cordón rojo y anudado,
legado de tradiciones.
Otro año sin su raso,
siluetas de cartones,
con su Cruz de Santiago,
patrón de España en su nombre.
También nos faltan sus
niños, futuras generaciones,
con cirio o de monaguillos
y sus caras de ilusiones.
Otro año sin mantillas,
de luto y rigor su corte,
sin Verónica ni Virtudes,
sin rosarios y sin broches.
Sin la mano de un abuelo
que al nazareno soporte
tarareando a su nieto con
sus amarguros sones.
Otro año sin su historia,
de hombres trabajadores,
sin familias amarguras de
toneleras labores.
Faltará también su
gente, y sus naranjos y flores,
sin escaleras del paso en
la Cruz de tus amores.
Otro año sin sus barrios,
sin sus vecinos ni “oles”,
sin sus añejos corrales
ni sus coquetos balcones.
Que no están puestas sus
calles, palpitando entre temblores,
ni sus casas encaladas
engalanadas de flores.
Otro año sin El Cerro,
sin su Parroquia y galones,
sin bajar por Real de
Utrera con su gente a borbotones.
Que nos falta su Carrera,
sus cornetas y tambores,
como la vuelta a su barrio
en un mar de sensaciones
Otro año, hermanos...
Y este año no es el agua,
sí una tormenta de horrores,
que como buenos cristianos
hay que llevar con galones.
Que no se mueva ni un
cirio, en casa con tus valores,
que acabe la pesadilla y
vuelva el sueño de amores.
Fuertes los quiere en la
Fe, el Señor de los Señores,
que recemos mucho juntos y
levantemos oraciones.
Porque todo pase pronto y
estemos sabe Dios dónde,
pero nos quede el consuelo
que alivie nuestros dolores.
Por tantas almas difuntas en un cielo de colores,
donde siempre es Viernes
Santo y no caben tentaciones.
Porque se curen los malos
y no enfermen más corazones,
que bajo el manto materno
María cuide a los mayores.
De aquellos que nos
criaron, legaron nuestros valores,
con bastón o pelo blanco
y esas manos de temblores.
Que merecen ese auxilio y
que estén entre algodones,
porque sin ellos no hay
nada, sin ellos, nuestros mayores.
Y por esos sanitarios en
esta tarea tan noble,
Madre ponles tú la mano y
que la fuerza les sobre.
Y por todos esos cuerpos
que luchan porque el mal corte,
por todas las profesiones
que tan valientes se exponen.
Y aunque no salga otro año
entre tantas desazones,
aunque la pena nos pueda y
la paciencia desborde,
aunque sus hijos esperen
su tez morena de amores,
seguirá quedando ELLA,
rogando mil compasiones.
Y aunque nos falte otro
año y nuestra sed no se colme,
aunque no se bañe el
barrio de azul y blanco cordones,
aunque la abuela sentada
tu ausencia te la perdone
con su llanto y con su
moño soñará con tus olores.
Madre…
Otro año que se pasa, sin
niños de servidores,
sin que Dos Hermanas rece
al paso de tus faroles.
Sin costaleros valientes,
sin esa llamada enorme
por los hermanos difuntos
del cielo y antecesores.
Otro año que se pasa,
como un preso en sus barrotes,
nadando buscando orilla en
tu mirada de soles,
donde tus mejillas sanen y
tus lágrimas se evaporen
en blanco encaje bolillos
que te alivie lo que llores.
Otro año pasará y volará
como un resorte,
como te canta tu salve
refugiando a pecadores.
¡¡¡Y llegará el año
que viene rodeada de fervores
y tu pueblo nazareno te
dedicará sus “OLES”!!!
Juan Manuel Haro Díaz.
Terminamos nuestra especial y particular Estación de Penitencia 2020 con el canto de la Salve AMARGURA:
Gracias a todas las personas que nos han hecho llegar a través de las distintas RR.SS fotografías, manualidades y que nos han hecho partícipes de como han vivido esta jornada de Viernes Santo.
Aquí os dejamos distintos links donde podréis revivir las distintas estaciones de penitencia de años anteriores: