sábado, 14 de marzo de 2020

Comunicado Oficial

Fervorosa e Ilustre Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús Descendido de la Cruz, Nuestra Madre y Señora de la Amargura y Santa Ángela de la Cruz.

¡Alabado sea Dios!

Queridos hermanos:

Ante las circunstancias acontecidas en las últimas semanas y siendo conscientes de los días que están por venir debido a la alerta sanitaria provocada por el COVID-19, y siguendo las intrucciones de las Autoridades y las directrices del Arzobispado de Sevilla, esta Junta de Gobierno reunida en Cabildo Extraordinario con carácter urgente, celebrado en la tarde de hoy día 14 de marzo, presidido por el Hermano Mayor Antonio Miguel Bascón Román y con la presencia de nuestro Director Espiritual D. Francisco de Asís Bustamante Sainz ha tomado las siguientes determinaciones mientras dure esta situación:

  • Suspender la reserva de la papeleta de sitio, se habilitará próximamente un espacio en nuestra web para que todo hermano que así lo desee pueda solicitar online la papeleta simbólica.
  • Suspender todos los Cultos internos y externos así como toda actividad programada.
  • La Capilla y Casa Hermandad permanecerá cerrada, siendo la atención a los hermanos a través del correo electrónico: secretariaamarguradh@gmail.com o por vía telefónica (casos de urgencias): 693491684.
  • Todas las noticias con carácter urgente y de interés público la Hermandad lo notificará a través de sus RRSS (Twitter: @HdadAmarguraDH / Facebook: Hermandad de la Amargura, Dos Hermanas) y página web: https://hdadamarguradh.blogspot.com/

Hacemos un llamamiento a mantener la calma y actuar según las recomendaciones de las autoridades competentes.

Agradeciendo de antemano toda vuestra compresión y colaboración, rogamos y pedimos en nuestras oraciones a Nuestro Padre Jesús Descendido de la Cruz, Nuestra Madre y Señora de la Amargura y Santa Ángela de la Cruz para que nos aude a todos en estos difíciles momentos que estamos viviendo.

La Junta de Gobierno.



"Acuérdate Oh piadosísima Virgen María, que jamás se oyó decir que hayas abandonado a ninguno de cuantos han acudido a tu amparo, implorando tu protección y reclamando tu auxilio. Animado con esta confianza, también yo acudo a ti, Virgen de las vírgenes, y gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante tu soberana presencia. No desprecies mis súplicas, Madre del Verbo Divino,
antes bien, óyelas y acógelas benignamente. Amén"